Buenos días a todos bienvenidos nuevamente a este espacio de educación en salud, mi nombre es Ana Girón medico general de clínicas WiseMed.
Y en esta ocasión platicaremos sobre la enfermedad de Hígado graso no alcohólico y estilo de vida.
La enfermedad del hígado graso no alcohólico (NAFLD por sus siglas en inglés) es la enfermedad hepática crónica más común en la actualidad, se calcula que su prevalencia a nivel mundial es de aproximadamente 25% a 30% y se diagnostica dos veces más en hombres que en mujeres se estima que NAFLD se convierta en la principal causa de cirrosis que requiera trasplante de hígado en la próxima década.
Esto responde al aumento de casos en obesidad, diabetes tipo 2, síndrome metabólico y otras enfermedades relacionadas con el estilo de vida a nivel mundial.
A diferencia de la enfermedad hepática alcohólica esta no está asociada al consumo de alcohol o se consume por debajo del valor que pueda provocar una enfermedad alcohólica sin embargo está relacionada al estilo de vida que veremos más adelante, suele ser una enfermedad asintomática pero puede tener serias complicaciones a largo plazo, la enfermedad cardiovascular es decir insuficiencia cardiaca, derrames, infartos es la causa más común de muerte en personas que padecen enfermedad hígado graso no alcohólico y una minoría puede llegar a desarrollar complicaciones como cirrosis y cáncer de hígado.
¿Cuáles son los Factores de riesgo de padecer la enfermedad de hígado graso alcohólica?
Bueno son varios pero casi todo están asociados a un estilo de vida más sano que provoca resistencia a la insulina entonces si padecemos alguno de los aspectos que están en esta es recomendable descartar esta enfermedad:
- Sobrepeso/obesidad (central).
- Pre-diabetes, diabetes o resistencia a la insulina.
- Síndrome de ovario poliquístico.
- Tener hipotiroidismo.
- Síndrome metabólico.
- Tener más de 50 años
En la evaluación médica aparte del examen físico se solicitan exámenes de laboratorio y en ocasiones estudios de imagen como ultrasonidos o fibroscan con el objetico de tener datos para saber que tan avanzada esta la enfermedad.
Si el hígado tiene un grado alto de fibrosis o la enfermedad está muy avanzada es necesario referir con un hepatólogo pues en estas circunstancias además de las modificaciones en el estilo de vida se suelen iniciar otras terapias entre ellas terapia farmacológica.
Actualmente no existe un tratamiento farmacológico eficaz para tratar la enfermedad por hígado graso no alcohólico por lo tanto el tratamiento se basa en las modificaciones del estilo de vida incluidos principalmente los cambios en la alimentación y el ejercicio, el tratamiento entonces no farmacológico sigue siendo la estrategia de primera línea en el manejo y prevención de este enfermedad.
Cuando nos referimos a tratamiento no farmacológico estamos hablando de cambios en el estilo de vida.
Los 6 pilares que componen un estilo de vida saludable:
- Comer de forma saludable.
- Aumentar la actividad física.
- Desarrollar estrategias para controlar el estrés.
- Formar y mantener relaciones interpersonales sanas.
- Mejorar hábitos del sueño.
- Suspender el abuso de sustancias.
Platicaremos de dos de ellas las cuales conforman el tratamiento de primera línea para la enfermedad de hígado graso no alcohólico que sería una alimentación adecuada y el ejercicio físico.
En cuanto a la nutrición y la alimentación la modificación en la alimentación es el tratamiento de mayor impacto en el hígado graso hay evidencia de que la pérdida de peso de tan solo el 5% reduce hasta el 80% de la grasa deposita en el hígado y casi la mitad de los pacientes con una pérdida de peso del 10% van a tener incluso una regresión en la fibrosis del hígado, la fibrosis es cuando ya está más avanzada la enfermedad, lo ideal es que el paciente con esta condición tenga seguimiento con una nutricionista clínica que guie la alimentación de acuerdo a las necesidades de cada paciente.
- Una alimentación poco saludable rica en calorías, azúcares y grasas saturadas y baja en ácidos grasos poliinsaturados, fibra y micronutrientes juegan un papel crítico en el desarrollo y progresión de esta enfermedad.
- Dieta mediterránea o cualquier dieta baja en grasa o carbohidratos.
- Baja en fructosa o azúcares añadidos.
- Refrescos de cola o gaseosas light.
En cuanto a la actividad física, el aumento de la actividad física tiene efectos beneficiosos terapéuticos en el hígado graso al reducir la grasa en el hígado independientemente de la reducción de peso , la actividad física debe ser adaptada a cada paciente de acuerdo a su capacidad y comodidades, en general como hablamos en charlas pasadas se recomienda 150 minutos semanales de actividad física distribuidos en la forma que le quede bien a cada persona sin embargo sabemos también que cualquier ejercicio es mejor que nada verdad entonces debe ser adaptada a la capacidad de cada paciente, la actividad física entonces también previene el desarrollo de físico graso y puede utilizarse como una estrategia valiosa para reducir el gasto en salud es decir deberían crearse políticas donde se fomente la actividad física y se fomente una alimentación saludable esto va a prevenir la enfermedad por hígado graso y por ende el gasto en salud que esta puede significar.
Debido a que la enfermedad de hígado graso no alcohólico como ya vimos antes está asociada a enfermedades metabólicas es decir a quienes se les diagnostican hígado graso usualmente tienen otras cormobilidades verdad el control de la presión arterial, los triglicéridos, el colesterol, mantener un peso adecuado, omitir el tabaquismo y el control de la diabetes son fundamentales.
Bueno esto es lo que teníamos preparado, muchas gracias por acompañarnos saben que en nuestras redes pueden encontrara información sobre varias de las enfermedades modernas y asociadas a estilo de vida y pueden estar revisando es material informativo e interesante para nuestro día a día y nuestras decisiones que tomamos en cuanto al cuidado personal.
Los esperamos el próximo viernes Muchas gracias por acompañarnos.